Las habilidades sociales es lo último que se puede desarrollar en el ámbito de la inteligencia emocional, antes tienes que haber trabajado tu autoconocimiento, tu autogestión y tu empatía. Con todo ello en tu “mochila” emocional es cuando puedes enfrentarte con todas las garantías de éxito a los desafíos que una especie social como el ser humano necesita enfrentarse cada día para tener éxito. ¡Y vaya si se nota cuando vas preparado!
