El libro se enmarca en las políticas nacionales e internacionales de inclusión educativa y en un modelo de atención que considera que trastorno no existe y que las causas de dichas conductas en los alumnos o las alumnas habría que buscarlas en el reconocimiento de diferentes factores no sólo físicos, sino psicosociales y afectivos que le rodean. El libro propone un enfoque de atención diversificada en el contexto del aula y la escuela para estos alumnos, es en estos contextos, pues es sólo a través de un modelo que piense la escuela y el aula como objetos de reflexión y mejora que podrá atenderse a los alumnos en general. Algunas alternativas que se ofrecen son: Para la escuela, el trabajo colaborativo y la mejora de las relaciones y la convivencia. Para el aula, el diseño Universal para el Aprendizaje y con referencia a las familias, mantener una comunicación constante.
